Introducción
En una época saturada de tendencias fitness, el método Pilates clásico sigue destacando por su precisión, control y profundidad.
Más que un entrenamiento físico, es una educación del movimiento que conecta cuerpo y mente a través de la respiración, la concentración y la intención.
Desde los estudios originales de Joseph Pilates en Nueva York hasta las escuelas contemporáneas en Girona, su esencia se mantiene viva: movimiento con control, fluidez y conciencia.
Qué hace único al método Pilates clásico
El método clásico conserva la secuencia, los principios y el enfoque del propio Joseph Pilates.
Cada ejercicio tiene un propósito, una respiración y una transición específicas.
No se trata de improvisar, sino de seguir un sistema inteligente que desarrolla fuerza, elasticidad y alineación.
Las principales características que lo distinguen son:
Orden y progresión: cada ejercicio prepara el siguiente.
Powerhouse: el centro de energía que sostiene el cuerpo.
Control y precisión: calidad por encima de cantidad.
Respiración dirigida: motor y guía del movimiento.
El objetivo no es repetir, sino refinar. No es hacer más, sino hacerlo mejor.
Relevancia actual del método clásico
Aunque nació hace casi un siglo, el método clásico responde hoy a necesidades contemporáneas:
Combatir el sedentarismo y la rigidez postural.
Recuperar el movimiento consciente frente al automatismo.
Integrar cuerpo, mente y respiración en una sola práctica.
En un mundo acelerado, Pilates clásico ofrece una vía de reeducación corporal y mental que invita a detenerse, sentir y reconectar con la presencia.
Del estudio de danza al método clásico
Mi propia experiencia con el movimiento nació en la danza contemporánea.
En los escenarios aprendí la importancia de la alineación, el control y la respiración: los mismos principios que hoy aplico en el Pilates clásico.
Esa transición entre arte y método me llevó a descubrir que el Pilates no solo fortalece, sino que enseña a habitar el cuerpo con precisión y presencia.
Una práctica que no impone, sino que escucha.
Puedes leer más sobre esta conexión en el artículo: De la danza contemporánea al método Pilates: el arte de moverse con conciencia
Pilates clásico en Girona
Desde Girona, dedico mi práctica al estudio y enseñanza del método clásico, siguiendo la línea de Kathryn Ross-Nash y Ruth Basté.
Mi enfoque combina la tradición original con una mirada consciente y pedagógica, integrando la precisión técnica con el respeto por el ritmo individual.
Pilates no es una moda; es una disciplina viva, un lenguaje del cuerpo que evoluciona con quien lo practica.
Si deseas conocer más sobre mi formación y trayectoria profesional, visita
mi página de formación y trayectoria
Conclusión
El método Pilates clásico sigue siendo relevante porque su propósito va más allá del ejercicio: busca el equilibrio entre cuerpo, mente y energía.
Cada sesión es una oportunidad para reeducar el movimiento y reconectar con la esencia del cuerpo.
En Girona, esta práctica se transforma en una herramienta de autoconocimiento y transformación profunda.
Pilates es la unión entre conciencia, respiración y alineación: una forma de volver al centro.
Soy Antonio Izquierdo, artista del movimiento y futuro instructor de Pilates clásico en Girona.
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